Alimentos y Vitaminas para un Cerebro Sano
La alimentación saludable complementada con actividad física es la formula ideal para una vida sana y no es un secreto. Sin embargo, es importante recordar cuáles son las propiedades de algunas frutas y verduras que pueden mantener nuestro cuerpo en óptimas condiciones.
De acuerdo con un artículo de la nutricionista de la Universidad de Harvard, Uma Naidoo, publicado por CNBC, revela que la vitamina B12 es vital para la salud y bienestar del cerebro.
Esta conclusión se desprende de un estudio realizado por expertos de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Wayne a una paciente mayor con depresión psicótica severa que fue estudiada.
Dicha investigación logró establecer que la anciana logró una recuperación significativa mediante el consumo de vitamina B12, mientras que el tratamiento convencional no funcionó.
Para la especialista en nutrición oncológica, Angélica María Pedraza Moreno, la importancia de la vitamina B12 radica en su componente. «La B12 es esencial para el buen funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso, ayuda a la formación de glóbulos rojos y es importante en el metabolismo de las proteínas«, explicó la nutricionista dietista de la Pontificia Universidad Javeriana.
Sobre esta vitamina, Sandra Patricia Alfaro Barragán, nutricionista de la Clínica Imbanaco de Cali, añade que «puede jugar un papel importante en el tratamiento de enfermedades como la depresión».
Pero, este aporte no es exclusivo de la vitamina B12, todo el grupo del complejo B aporta a la salud de la mente. La doctora Pedraza las define así:
1. B1 Tiamina: ayuda a convertir los nutrientes en energía.
2. B2 Riboflavina: ayuda como antioxidante.
3. B3 Niacina: importante en la producción y reparación del ADN.
4. B5 Ácido pantoténico: participa en la producción de hormonas.
5. B6 Piridoxina: participa en el metabolismo de los aminoácidos, producción de glóbulos rojos y creación de neurotransmisores.
6. B7 Biotina: esencial en el metabolismo de los carbohidratos y grasas. Regula la expresión genética.
7. B9 Folato: necesario en el crecimiento celular, metabolismo de los aminoácidos, formación de glóbulos rojos y blancos.
8. B12 Cobalamina: vital en la función neurológica, producción de ADN y desarrollo de glóbulos rojos.
Fumar, excederse en el consumo de alcohol y las dietas desbalanceadas como los ayunos prolongados o las dietas ketogénicas, pueden influir en el deterioro del cerebro al reducir la ingesta de las vitaminas necesarias para el cerebro, explica la doctora Alfaro.
Ambas expertas apuntan que a lo anterior, se le suma el consumo regular de alimentos como azúcares refinados, comida chatarra, alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas.
«Todo lo que viene en paquetes y los excesos de aditivos pueden alterar la función cerebral», sostiene Alfaro.
Por su parte, Pedraza añade que estos alimentos «no solamente tienen un impacto negativo en la salud del cerebro, sino en la salud en general, ya que los aportes calóricos son básicamente azúcares y sales que conllevan a enfermedades como la obesidad, diabetes, hipertensión por nombrar las más conocidas. Su aporte es casi nulo si lo miramos desde lo nutritivo».
Alimentos recomendados para un cerebro sano
La doctora Naidoo recomienda cinco alimentos ricos en vitaminas B que puede consumir en el día a día:
1. Huevos: contiene un tercio del valor diario recomendado de vitamina B7, a la vez que contiene pequeñas cantidades de muchas de las otras vitaminas del grupo B.
2. Yogurt: tiene un alto contenido en vitamina B2 y vitamina B12, así como en probióticos naturales, que favorecen tanto la salud intestinal como la salud mental.
3. Legumbres: los frijoles, garbanzos, las lentejas y habas ayudan a mejorar el estado de ánimo y la salud del cerebro. Son una excelente fuente de vitamina B9, e incluyen pequeñas cantidades de vitamina B1, vitamina B2, vitamina B3, vitamina B5 y vitamina B6.
4. Salmón:es naturalmente rico en todas las vitaminas del grupo B, especialmente en vitamina B2, vitamina B3, vitamina B6 y vitamina B12. Su versión congelada es más económica y puede ser una opción.
5. Espinacas: las verduras de hoja verde son una gran fuente de vitamina B9. Igual que las acelgas y el repollo.
A estas recomendaciones se suma la importancia de consumir otras vitaminas en la dieta frecuente.
«Por ejemplo, la vitamina A que está presente en las frutas y verduras verdes, amarillas y rojas. La vitamina C que está en la naranja, la guayaba, la granadilla, los limones, las fresas, las frambuesas y la vitamina E que podemos encontrar en el aguacate, el aceite de oliva, las nueces y las semillas«, incluye la nutricionista licenciada en biología.
Es necesario que tenga en cuenta estos alimentos para que pueda consumirlos diariamente y no esperar hasta que se tenga alguna enfermedad o edad avanzada.